Cómo administrar el dinero durante una crisis
Los efectos financieros de una pandemia global, como la de la COVID-19, son de gran trascendencia. Si bien todos tomamos las medidas necesarias para priorizar la salud y la seguridad, también es conveniente tomar medidas para proteger las finanzas.
Durante este período de incertidumbre, ha habido muchos cambios en el modo en que usted administra su dinero y realiza actividades comerciales. Aquí incluimos algunos pasos que podrían ayudarle a adaptarse:
1) Inscríbase en los servicios de banca por Internet (o aprovéchelos al máximo, si ya tiene acceso)
Al administrar las finanzas por Internet o a través de la banca móvil, usted puede consultar saldos de cuentas, pagar cuentas, hacer transferencias y satisfacer muchas de sus necesidades bancarias cotidianas fácilmente. Verifique si su institución financiera ofrece herramientas por Internet que también pueden ayudarle a monitorear sus hábitos de gasto, y a enviar y recibir dinero. Utilizar estas herramientas puede ayudarle a ver en qué situación se encuentra y a planificar para el futuro, todo desde la seguridad de su hogar.
2) Revise su presupuesto y sus ahorros
Considere ajustar su presupuesto para asegurarse de tener fondos suficientes para cubrir los gastos esenciales. Si está recibiendo menos ingresos, priorice las cosas en las que gasta y recorte los gastos innecesarios. Crear un presupuesto y ceñirse a él es una estrategia razonable en cualquier momento, pero especialmente cuando sus finanzas han recibido un golpe imprevisto.
Si recibe un reembolso de impuestos u otra ganancia inesperada, considere la posibilidad de asignar una parte a aumentar sus ahorros o cree un fondo para emergencias para futuras situaciones imprevistas.
3) Efectúe sus pagos puntualmente
Durante los momentos de dificultad, intente pensar a largo plazo en lo relativo a su crédito. Aunque puede llegar a ser difícil, intente realizar al menos los pagos mínimos de sus deudas a más tardar en su fecha de vencimiento. Si se atrasa 30 días o más, dicho atraso puede permanecer en su informe de crédito hasta siete años y el 35 por ciento de su puntuación de crédito se basa en su historial de pagos. Por lo tanto, si bien los saldos de tarjeta de crédito más altos también pueden reducir su puntuación de crédito, ese impacto podría ser más fácil de manejar con el transcurso del tiempo que un pago omitido.
4) Use el crédito con inteligencia
Si necesita trasladar saldos o pedir prestado más dinero, haga una lista de sus fuentes de crédito actuales, incluidos los saldos actuales, los límites de crédito y las tasas porcentuales anuales (APR, por sus siglas en inglés). Tenga presente la fecha de finalización de las ofertas introductorias del cero por ciento.
Evite utilizar una sola tarjeta hasta su límite máximo. De ser necesario, distribuya los gastos en varias tarjetas. Use las líneas de crédito con las tasas APR más bajas primero para minimizar los intereses que paga.
Si tiene buenos antecedentes de crédito, podría considerar la posibilidad de solicitar límites de crédito más altos en sus tarjetas de crédito actuales. Los límites más altos pueden suavizar el impacto de los saldos más altos que los habituales en su puntuación de crédito y fortalecer su red de seguridad.
Si sus antecedentes de crédito no son tan buenos, tenga cuidado con los préstamos de día de pago y sobre el título de su automóvil. Las ofertas de efectivo rápido pueden ser tentadoras, pero a menudo conducen a espirales de deudas. Además, un préstamo sobre el título pone en riesgo su transporte.
5) Comuníquese con prestamistas y proveedores de servicios
Si tiene dificultades, comuníquese con sus prestamistas y emisores de tarjetas de crédito de inmediato. Las instituciones financieras podrían tener opciones para casos de dificultades económicas que le permitan solicitar una suspensión de pagos a corto plazo, o posiblemente aplazar o reducir sus pagos. También podría calificar para recibir ayuda con otras cuentas. Consulte los sitios Web de sus proveedores de servicios. Es posible que muchas compañías de electricidad, telefonía e Internet estén suspendiendo las desconexiones durante este período. Verifique la gran cantidad de recursos en 211.org o llame al 211 para que le conecten.
6) Protéjase del fraude
La Comisión Federal de Comercio y otras agencias han advertido a los consumidores que deben estar atentos a los estafadores que se aprovechan de la crisis. Desconfíe de los mensajes que afirmen ser de acreedores, empleadores u organizaciones benéficas. No responda a correos electrónicos o llamadas telefónicas directamente, y solo comuníquese con números de teléfono o direcciones de correo electrónico que usted sepa que son correctos, como la información de contacto en el sitio Web de un acreedor o de una organización benéfica.
La pandemia del coronavirus está cambiando el modo en que hacemos muchas cosas cotidianas, inclusive cómo administramos nuestra situación financiera. Si necesita información general sobre el estado del coronavirus, busque directamente en sitios confiables, como el de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades o la Oficina para la Protección Financiera del Consumidor.